En enero del 2007 comienza el 23 festival de música de Canarias, un festival que todos los canarios debemos aprovechar porque es una inversión de fondo público que nos permite participar desde nuestra tierra en conciertos de excelencia musical, como digo, se inició con una obra de Britten: War Réquiem interpretado por la orquesta sinfónica de Tenerife, el coro de la BBC y nuestro coro infantil de la OFGC.
Esta obra es un alegato antibelicista que pone de manifiesto las atrocidades que se cometen a lo largo de una guerra, en este caso la guerra mundial, y trata de manifestar la necesidad de que los pueblos vivan en armonía independientemente de quienes sean.
La obra ayer escuchada fue realizada como una misa de difuntos a lo largo de 85 minutos, el coro de la BBC, sorprendentemente formado por unas 200 voces ya bastante maduritas, representaba la comunidad que lloraba por sus muertos y el coro infantil de la OFGC simbolizaba el mundo de ultratumba.
Creanme que el conjunto me llegó a poner los pelos de punto.
Las voces angelicales de nuestro coro infantil llegaron a trasportarme casi hasta el cielo, me hicieron vagar por el auditorio hasta el espacio de donde salían escondidas detrás del escenario, desde aquí agradecer a su directora la gran labor que realiza con estos niños y adolescentes que hacen que4 la música sea algo más que unos sonidos.
El coro de la BBC realizó un espectáculo que merece dedicarle unos minutos, sorprende como todas estas personas pueden realizar una composición sin que parezca que sean voces independientes, a veces llegas a pensar que no existe discordia y que la solidaridad y unión de las personas puede ofrecer lo mejor que tiene el ser humano.
Voces acompañadas con instrumentos pero que por si solas pueden trasportarnos hasta lo más alto y hacernos sentir lo que quieren que sintamos que en este caso, es un llanto a la pérdida sin razón de seres queridos por las absurdas guerras, por intentar poner nuestras opiniones por encima de cualquier diálogo, por la pérdida de valores que nunca debemos olvidar que deben ser objetivo fundamental de nuestras vidas.
Comenzamos un año más, un año con significado político, intentemos que las campañas realcen los valores del ser humano y que nuestros políticos nos traigan para siempre la paz para que estas voces que ayer escuchamos queden siempre como un lamento del pasado.
Esta obra es un alegato antibelicista que pone de manifiesto las atrocidades que se cometen a lo largo de una guerra, en este caso la guerra mundial, y trata de manifestar la necesidad de que los pueblos vivan en armonía independientemente de quienes sean.
La obra ayer escuchada fue realizada como una misa de difuntos a lo largo de 85 minutos, el coro de la BBC, sorprendentemente formado por unas 200 voces ya bastante maduritas, representaba la comunidad que lloraba por sus muertos y el coro infantil de la OFGC simbolizaba el mundo de ultratumba.
Creanme que el conjunto me llegó a poner los pelos de punto.
Las voces angelicales de nuestro coro infantil llegaron a trasportarme casi hasta el cielo, me hicieron vagar por el auditorio hasta el espacio de donde salían escondidas detrás del escenario, desde aquí agradecer a su directora la gran labor que realiza con estos niños y adolescentes que hacen que4 la música sea algo más que unos sonidos.
El coro de la BBC realizó un espectáculo que merece dedicarle unos minutos, sorprende como todas estas personas pueden realizar una composición sin que parezca que sean voces independientes, a veces llegas a pensar que no existe discordia y que la solidaridad y unión de las personas puede ofrecer lo mejor que tiene el ser humano.
Voces acompañadas con instrumentos pero que por si solas pueden trasportarnos hasta lo más alto y hacernos sentir lo que quieren que sintamos que en este caso, es un llanto a la pérdida sin razón de seres queridos por las absurdas guerras, por intentar poner nuestras opiniones por encima de cualquier diálogo, por la pérdida de valores que nunca debemos olvidar que deben ser objetivo fundamental de nuestras vidas.
Comenzamos un año más, un año con significado político, intentemos que las campañas realcen los valores del ser humano y que nuestros políticos nos traigan para siempre la paz para que estas voces que ayer escuchamos queden siempre como un lamento del pasado.
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