El Verano

Cuando les pregunté a mis hijas adolescentes que viven ajenas a todos los problemas que nos rodean de que podía opinar me aconsejaron que hablara de las vacaciones.
Estamos en nuestras vacaciones veraniegas, algunos ya las han disfrutado pero la gran mayoría las esperan con ansiedad. Muchos de nosotros esperamos las vacaciones para reponer nuestra paz interior, nuestro cansancio, el estrés generado del trabajo en compañía de nuestra familia.
Muchos necesitamos silencios pero en vacaciones con niños cerca sólo se pueden encontrar cuando ellos duermen y lo hacen bastante tarde.
Encontrar los silencios, el primer objetivo de nuestras vacaciones familiares, difícil eh?
Muchos necesitamos relajar el cuerpo, las tensiones, descansar. Buscamos SPAs que no estén masificados, piscinas que no nos salpiquen, masajes que no sean para dentro de semanas, tumbonas sin niños cerca, etc.., sentir nuestro cuerpo, respirar con calma, caminar sintiendo cada uno de nuestros pasos.
Encontrarnos con nuestro cuerpo relajado, el segundo objetivo de nuestras vacaciones, difícil eh?
Encontrarnos con nuestros familiares, el tercer objetivo. Tomarse el tiempo para compartir y obervar lo que nos rodea, captar sus pensamientos, sus gustos, sus alegrías y sus miedos.
Sabían que después de unas largas vacaciones suelen producirse la gran parte de las separaciones?
Así que encontrarnos con nuestros hijos y pareja, difícil eh?
No quiero que esto sea una travesía como la de Indiana Jones en busca del templo perdido, sólo espero que podamos vivir plenamente nuestros días libres para que nos duren a lo largo de todo el año que nos queda para disfrutar de las próximas y mucha suerte a todos.