Tener buen humor

Aprovechando que esta semana uno de los actos estrella de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria a través del Vicerrectorado de Cultura y Deportes es el Humor quería hablar del humor.
Se considera que uno de los rasgos diferenciadores de una comunidad y una cultura es su sentido del humor. La gente canaria se distingue por su manera de enfrentarse con la vida, con humor y optimismo.
El humor es algo más que humor, es una perspectiva ante la vida.
Todos hemos tenido muchos obstáculos para la risa. Nos han enseñado desde pequeños que no debemos reírnos. Nos han inculcado la seriedad, que reír es malo y lo serio bueno.
Hay lugares donde está prohibido reírse(iglesia, funeral), otros en los que está recomendado no reír (situaciones laborales).
No hay lugares donde se recomiende reír, sólo lugares en los que está permitido y no está mal visto, ni desacredita (espectáculos de humor, películas de risa).
El humor es una demostración de grandeza que pareciera decir que en última instancia todo es absurdo y que lo mejor es reír, como aquel condenado a muerte que llevan a la horca un lunes y exclama: "¡Bonita forma de comenzar la semana!".
Es una afirmación de dignidad, una declaración de superioridad del ser humano sobre lo que acontece.
Es una herramienta crítica de gran eficacia. Permite ver lo que los demás no perciben, ser consciente de la relatividad de todas las cosas y revelar con una lógica sutil lo serio de lo tonto y lo tonto de lo serio.
Ya en la Biblia podemos leer: "Un corazón alegre es como una buena medicina, pero un espíritu deprimido seca los huesos".
Parece que la academia es sinónimo de seriedad y cuando uno va con buen humor pues o te faltan luces o algo te ha pasado.
Como dije al principio el humor es una perspectiva de vida y con la creación del Aula del Humor en esta Universidad lo estamos demostrando.